Datos personales

GIJÓN/XIXÓN, ASTURIAS
Un lector por libre. Leo lo que me apetece en cada momento, lo que encuentro, por ejemplo rebuscando en la biblioteca pública, o cualquier título que me llame la atención en una librería. No soy metódico, me dejo influir, qué remedio, por lo que va saliendo, pero guardo un mínimo espíritu anárquico para que no todo sea al dictado. Este blog no pretende ser guía para nadie, ni una recopilación de críticas. Sólo reseñas de lo que cae en mis manos.

lunes, 10 de noviembre de 2008

CAOS CALMO


Sandro Veronesi ganó el premio Strega con esta espléndida y sorprendente novela, plenamente actual y , por tanto, llena de referencias contemporáneas. Cuenta el parón vital de un alto ejecutivo de una cadena de pago a partir del día en que, tras salvar a una mujer de ahogarse, llega a casa justo cuando su mujer acaba de morir. Su vida da un vuelco y desde entonces decide ocuparse al cien por cien de su hija Claudia. No lo planificó, simplemente sucedió. Y lo hizo de una forma absurda, prometiendo a su hija, el primer día que volvió al colegio, que no se apartaría de allí hasta que saliera. Lo que parecía una promesa de un día, para intentar frenar la esperada caida en la desesperación de la niña, se convirtió en costumbre. Y así día tras día Pietro permanece a la puerta del colegio durante toda la jornada escolar, a ratos en su coche, a ratos en un parque cercano. La situación va generando todo tipo de reacciones, por lo que supone de contrario a lo razonablemente correcto. A la comprensión del principio, tanto de sus compañeros de trabajo, como de sus familiares, sigue la estupefacción y luego una especie de empeño colectivo en convencerle de que se someta a tratamiento psicológico. El asunto es que, por lo que parece, todos los que pasan a verle a la puerta del colegio parecen necesitar más al terapeuta que el propio Pietro. En todo caso, instalado en ese caos calmo, Pietro puede repasar su vida, desde las pequeñas cosas a la ininteligible fusión de su empresa, y al tiempo se convierte en paño de lágrimas de su cuñada, su hermano o los directivos de su empresa. Es un cuadro fantásticamente contado, muy cercano y en el que es difícil no verse retratado. La novela fue llevada al cine por Grimaldi y protagonizada por Nanni Moretti. No la he visto y cuando me he enterado la cara de Moretti no me pareció la más parecida a la que imagen que me había creado de Pietro. En todo caso una novela magnífica y muy recomendable.

No hay comentarios: