Datos personales

GIJÓN/XIXÓN, ASTURIAS
Un lector por libre. Leo lo que me apetece en cada momento, lo que encuentro, por ejemplo rebuscando en la biblioteca pública, o cualquier título que me llame la atención en una librería. No soy metódico, me dejo influir, qué remedio, por lo que va saliendo, pero guardo un mínimo espíritu anárquico para que no todo sea al dictado. Este blog no pretende ser guía para nadie, ni una recopilación de críticas. Sólo reseñas de lo que cae en mis manos.

miércoles, 14 de octubre de 2015

EL ELIXIR DE LA INMORTALIDAD

Gabi Gleichman, nacido en Hungría, pero creado y formado primero en Suecia y luego en Noruega, firma esta voluminosa novela sobre el clan Spinoza, lo que nos acerca, a grandes trazos, parte de la historia europea desde el siglo XII. Y es que es en ese siglo cuando arranca la historia, y en un pueblo, Espinosa, en lo que hoy es Castilla y León, donde radicaba una familia judía. Su primogénito Baruj recibió la visita del profeta Moisés que le dijo que debía abandonar el pueblo porque estaba llamado a hechos mayores.Y así fue, porque acabó en Lisboa como médico personal del Alfonso Enríquez, y con él arranca una de las sagas familiares más exitosas de la historia europea. Gleichman recurre al último personaje del clan, Ari Spinoza, que es el que narra la historia familiar. Agoniza en Oslo y al no tener descendencia se da cuenta de que todo acaba con él y decide recopilar los datos que tiene, que no son más que recuerdos de lo que le contaba de pequeño, en Budapest, un tío abuelo. Ese recurso literario disculpa exageraciones, inexactitudes en las fechas y lugares  y divagaciones más o menos míticas, que parecen salidas totalmente del Antiguo Testamento. El hilo narrativo se apoya en la existencia de un supuesto libro que contiene el secreto de la fabricación del elixir de la inmortalidad, por el que hasta el mismo Hitler se interesó, y que sólo se transmitía a los primogénitos de la familia.
Es en esa forma elegida para la narración donde habría que obviar además el recurso a viejos tópicos sobre las páginas más negras de la leyenda negra que le colgaron a España, y el protagonismo decisivo que se da a algunos de los Spinoza, que parecieron decisivos en momentos claves de la historia del viejo continente. Especialmente interesantes son las páginas que dedica a Salman Spinoza, el judio errante, o a  Moisés Spinoza, al que atribuye EL LIBRO DEL ESPLENDOR.
En fin, leído con atención, uno concluye que sobran por lo menos doscientas páginas que se van en repeticiones y anécdotas que se apartan de la historia principal, y que hay que tomarse la obra como lo que es, una recopilación inexacta de biografías de los elementos más importantes de los Spinoza, a través de los recuerdos de lo que le contaron cuando era un niño. En todo caso interesante, especialmente para los que quieran saber más sobre la presencia y avatares de los judíos en Europa.

No hay comentarios: